UN SIMPLE ESPECTADOR

Montones de personas recorren las calles de la ciudad, todas ellas tienen un destino. Algunos irán a casa, otros irán a trabajar o a comprar pero todos tienen una meta.

Yo en cambio solamente me siento en un banco a observar a la gente, muchas veces veo a niños jugar, de cierta manera me recuerdan a mi infancia cuando era un niño que soñaba que podía llegar a la luna.

Sin embargo este mundo me a demostrado ya varias veces que no es posible, que en mi mundo no existen los finales felices.

Desearía ver, y vivir una vez más mi niñez para cambiar muchas cosas. Pero eso es imposible ahora mismo en este banco viendo como la gente y el tiempo pasan ante mis ojos sigo siendo un simple espectador.